Ubicada en el pintoresco pueblo de Termeno, en el corazón del Alto Adige, Elena Walch se ha consolidado como un pilar de la viticultura italiana. Su historia moderna comienza en 1985, cuando la arquitecta Elena Walch se une a la familia vinícola y asume la responsabilidad de un legado centenario. Con visión innovadora, rompe con los métodos tradicionales y redefine la enología en la región, impulsando la llamada “revolución de la calidad” en el Alto Adige.

Misión: La filosofía de la bodega se basa en la convicción de que el vino debe ser un reflejo fiel de su terroir, resultado de la suma entre suelo, clima y el trabajo humano. Su misión es crear vinos elegantes y auténticos, que expresen la identidad única de sus viñedos y que al mismo tiempo respeten el entorno natural mediante prácticas sostenibles.

Viñedos icónicos:

Castel Ringberg: 20 hectáreas sobre el lago Caldaro, con suelos de grava y arcilla que dan origen a Pinot Grigio, Chardonnay y Sauvignon Blanc de gran mineralidad y elegancia.

Kastelaz: viñedo en forma de anfiteatro, empinado y soleado, con suelos de arcilla y caliza ideales para el Gewürztraminer, reconocido por su concentración y complejidad aromática.

Compromiso sostenible: prácticas que incluyen reducción de pesticidas, conservación del agua y fomento de la biodiversidad, asegurando un equilibrio entre tradición, modernidad y respeto por la naturaleza.

Reconocida como una de las bodegas líderes en Italia, Elena Walch combina la herencia familiar con una visión moderna que ha marcado tendencia en la viticultura del Alto Adige.